jueves, octubre 21, 2010

La pobreza y el pescado, o ¿Quién corta el bacalao?, podría titularse también

Hola, chicos. (No es que acuse la desaparación del ministerio de la Igualdad, es que me parecen tonterías las cositas en plan @). Esto no tiene que ver con la India directamente, pero es un articulito tan bueno que no puedo pasarlo por alto a pesar del número limitado de lectores de este blog. Y es que Vicente Romero ha vuelto a escribir para hacernos reflexionar a todos, una gran entrada en su blog de RTVE. Se llama "La pobreza y el pescado", y recomiendo su lectura fervientemente.

Porque tiene toda la razón. ¿Es que hay alguien que no haya oído eso de "enseñar a pescar en lugar de dar el pescado"? Sí, sí, muy bonito, o eso parece, pero en el fondo, ¿es que hay pueblos que no sepan pescar? Seguro que se les da mejor a aquellos con una economía menos corporativizada. Es sencillo, si quieren pescado o lo pescan o lo compran en el puerto donde acaba de llegar recién pescadito, en lugar de ir a un supermercado enorme a las afueras para comprar unos filetes de panga congelados. Que vete tú a saber de dónde vienen, cómo los han pescado y cómo es una panga, porque no he visto nunca ninguna... Sólo sus filetes blancuzcos, delgados, gelatinosos una vez descongelados. Y vete tú a saber a qué sabe la panga, ese es otro misterio...

El caso es que ya saben pescar. Y cosechar. Y cazar. Y vivir. ¿Entonces, por qué sufren esa pobreza? Pues como bien dice Vicente Romero, cómo van a pescar, cosechar o cazar si nos lo hemos llevado todo en nuestros enormes buques de pesca refrigeradores que nos traen el pescado al Carrefour del polígono desde África. Como ya hemos acabado con lo que casi todo había en el Cantábrico, Atlántico, Mediterráneo y Mar del Norte... Cómo van a cosechar si los caritativos magnates que con sus organizaciones sin ánimo de lucro, pero deductoras de impuestos (leed este artículo sobre los agricultores africanos y la Revolución Verde de Bill Gates), les dan semillas híbridas sin dejarles usar las propias de su zona, obligando a los agricultores a cambiar su alimentación y a comprar continuamente nuevas semillas porque esas no se reproducen igual que las normales. De momento parece que no les dan transgénicas, pero sí que ha habido iniciativas así con transgénicos otras zonas, como en Haití cuando lo del terremoto, por ejemplo. Cómo van a cosechar si están ocupados intentando sobrevivir gracias a nuestros tejemanejes en la política local hemos puesto y quitado a gentuza del poder según convenía, causando guerras civiles que ha dejado a la gente en la miseria y en la necesidad... No se lo hemos puesto más difícil porque no hemos podido, vaya.

Y no sigo porque me estoy poniendo mala. Leed a Vicente Romero, que lo cuenta mucho mejor que yo.

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